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Por qué evitar tener un minipig en el hogar

Grupo Editorial RedZoocial

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Por qué evitar tener un minipig en el hogar
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En los últimos años, los minipigs se han convertido en una tendencia en redes sociales, donde se presentan como criaturas adorables y adecuadas para la vida en apartamentos. Sin embargo, la realidad detrás de estos animales es más compleja de lo que aparentan esos videos virales. La adquisición impulsiva de un "cerdo miniatura" puede resultar en abandono y maltrato, impulsados por la desinformación.

Tamaño y crecimiento real de los minipigs

Uno de los mayores malentendidos sobre los minipigs es su tamaño adulto. Aunque algunas granjas promueven la idea de que estos animales se asemejan en tamaño a razas pequeñas de perros, la verdad es que los minipigs pueden alcanzar hasta los 100 kilos y medir más de 60 centímetros de altura. Esta realidad contrasta con las expectativas iniciales de muchas personas, que se ven sorprendidas al notar el rápido crecimiento de su "miniatura" cerdo.

Necesidades de cuidado peculiares

Los minipigs no son animales de compañía comunes. Su bienestar depende de un cuidado especializado que tenga en cuenta su naturaleza intrínseca como cerdos. La doctora Janeth Pérez, de la Universidad CES, enfatiza que "un óptimo estado de salud física y emocional para los minipigs requiere atención a su dieta, espacio y cuidados veterinarios regulares". Además, la esterilización es vital para prevenir camadas no deseadas.

Riesgos sanitarios implícitos

Los minipigs, al igual que los cerdos de granja, están expuestos a enfermedades como la peste porcina clásica. Este riesgo ha llevado al Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) a imponer regulaciones estrictas sobre la tenencia de estos animales. A pesar de ello, no existen criaderos o vendedores oficialmente registrados, lo cual agrava la situación. Claudia Angulo del ICA advierte que "el marco regulador fue necesario para salvaguardar nuestras producciones comerciales y el estatus sanitario del país".

Problemas de comportamiento y espacio

Los minipigs necesitan mucha atención e interacción social. El espacio restringido como un apartamento no solo limita su movilidad, sino que puede llevar a problemas de comportamiento. Las pezuñas de los cerdos son susceptibles a deformaciones en superficies duras o lisas, lo cual puede causarles incomodidad y sufrimiento.

Consecuencias de la moda del minipig

La popularidad de los minipigs ha generado una industria descontrolada de cría, donde las promesas de "cerdos en miniatura" engañan a consumidores desprevenidos. Esta situación ha conducido a numerosos casos de abandono cuando las expectativas no se cumplen. Sara López, también del CES, resalta que "es alarmante ver cómo estos animales terminan siendo abandonados en entornos urbanos, lo cual pone en riesgo no solo al animal, sino también al ecosistema local".

La necesidad de conciencia y educación

Organizaciones como la fundación MiniOink Colombia han surgido para abordar el problema de la desinformación y defender los derechos de estos animales. MiniOink no solo rescata cerdos maltratados o abandonados, sino que también busca educar al público sobre lo que realmente implica tener un minipig como mascota.

En resumen, aunque los minipigs se promocionan como mascotas adorables y manejables, la realidad es que requieren cuidados y condiciones que la mayoría de los hogares no pueden ofrecer. Antes de sumarse a esta moda, es crucial investigar y considerar si se puede cumplir con las exigencias de estos singulares animales.