Morita, la perrita que espera un hogar desde una Navidad

Una historia de abandono en la época más festiva

La Navidad es sinónimo de unión familiar y momentos de alegría, pero no todos tienen el privilegio de vivir esa realidad. Tal es el caso de Morita, una perrita cuya vida cambió drásticamente hace nueve años, en plena festividad navideña. Fue el 22 de diciembre cuando Morita, entonces con solo dos años de edad, fue abandonada sin remordimientos frente al Centro Comercial Fontanar en Cajicá, Cundinamarca. Esperó durante horas, con la esperanza de que su familia, aquella que le había dado una vida hasta ese momento, volviera por ella. Pero eso nunca sucedió.

Un rescatador con compasión

Afortunadamente, Morita no pasó desapercibida. Un peatón que pasaba por el lugar vio a la desconsolada perrita y, con una simple galleta y una mano llena de compasión, se acercó a ella. Este pequeño acto de bondad, significó para Morita la apertura de un nuevo capítulo que le brindaría seguridad y cuidado en las manos de la Fundación TEPA.

La vida de Morita en la Fundación TEPA

Desde aquel día, Morita ha contado con el cariño y la protección de los voluntarios de la Fundación TEPA. Allí ha crecido y prosperado, devuelta a una vida de atención y respeto. Sin embargo, han pasado ya nueve largos años y, a pesar de los cuidados brindados, lo que Morita realmente anhela es un hogar permanente.

"Morita es una perrita llena de vitalidad y amor", comenta una de las voluntarias de la fundación. "A pesar de su edad, le encanta jugar y adora la compañía de las personas. La vemos como parte de nuestra familia, pero sabemos que merece un lugar donde pueda recibir el amor exclusivo de un hogar".

La espera por un hogar definitivo

Ahora, Morita ha pasado de ser una cachorra a una perrita sénior. Con 11 años de edad, su energía y ternura permanecen intactas. Sus cuidadores tienen el noble objetivo de verla disfrutar de sus años dorados en un lugar cálido, rodeada de una familia que la valore por quien es, una sobreviviente que nunca ha perdido su espíritu positivo.

La Fundación TEPA lleva tiempo trabajando en su adopción, esperando que pueda encontrar un hogar donde pasar el resto de su vida. "No necesita más que amor, un refugio seguro, y personas que comprendan la dicha de cuidar de una mascota sénior", afirman en la fundación.

Cómo puedes ayudar a Morita

Para aquellos interesados en cambiar la vida de Morita para siempre, la Fundación TEPA ofrece un proceso de adopción informado y dispuesto a resolver cuantas dudas puedan surgir. Simplemente, pueden comunicarse con ellos a través de sus redes sociales, donde estarán encantados de compartir detalles sobre la historia de Morita y cómo puede integrarse a un nuevo hogar.

Al adoptar a una mascota como Morita, no solo se está brindando un hogar a quien ha conocido el abandono, sino que también se está haciendo espacio para que otros puedan recibir la atención que tanto necesitan.

Morita todavía espera, pacientemente y con la esperanza intacta, el momento en que pueda finalmente decir "estoy en casa".