Kira desapareció y necesita una cirugía urgente
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El 14 de febrero, Kira, una perrita bull terrier de cinco años llena de energía y amor, desapareció de su hogar en la localidad de Kennedy, Bogotá. Este incidente desencadenó una serie de desafortunados eventos, con Kira ahora enfrentando la necesidad urgente de una cirugía debido a una grave fractura.
Una desaparición repentina
Kira, acostumbrada a la vida familiar y querida por todos, salió de su hogar una tarde, probablemente siguiendo algún estímulo curioso del mundo exterior. Su desaparición generó una crisis en su familia, compuesta por Zulma Herrera, su pareja y sus hijos, todos profundamente encariñados con la perrita, que es sinónimo de amor y protección.
La alarma cundió rápidamente, y se inició una campaña de búsqueda por los alrededores. La consulta de cámaras de seguridad en el vecindario reveló imágenes desconcertantes: Kira fue vista siendo introducida en un vehículo por una persona desconocida. Esta evidencia apuntaba a un robo, un hecho que no solo aumentó la angustia de la familia, sino que también encendió una alarma en la comunidad respecto a la seguridad de sus mascotas.
El accidente que lo cambió todo
Días después de su desaparición, Kira fue hallada en el barrio Venecia gracias a la llamada de una mujer que la reconoció de los carteles de búsqueda. Sin embargo, la alegría de hallar a Kira se vio oscurecida por las condiciones en las que fue encontrada. Había sido abandonada y, desafortunadamente, atropellada por una moto.
El accidente dejó a Kira con una severa fractura en su pata izquierda, requiriendo una intervención quirúrgica inmediata para evitar complicaciones mayores y garantizarle una recuperación completa. Testigos indicaron que el impacto fue fuerte y que el motorista se dio a la huida. Este tipo de incidentes pone en evidencia no solo la vulnerabilidad de las mascotas cuando se encuentran sin supervisión, sino también la falta de responsabilidad de algunas personas en cuanto a la seguridad vial.
El desafío económico
El diagnóstico veterinario reveló que la cirugía para reparar la fractura de Kira costaría entre dos y tres millones de pesos colombianos. Zulma Herrera y su pareja, sus dueños, han señalado la dificultad de costear un procedimiento tan elevado. Como muchas familias que viven al día, disponer de una suma tan significativa en un corto plazo es un gran reto.
Sin embargo, el amor por Kira impulsa a esta familia a buscar todas las alternativas posibles para brindarle la atención que necesita. "Kira no es solo una mascota, es parte de nuestra familia", dice Zulma, con lágrimas en los ojos al hablar de su fiel compañera.
Comunidad y solidaridad
Con la urgencia de la situación, los dueños de Kira han recurrido a las redes sociales y a la comunidad local en busca de apoyo. Han lanzado una campaña de recolección de fondos, esperando que la bondad de las personas y el amor por los animales sean una fuerza potente para cambiar el destino de su querida perrita.
La respuesta inicial ha sido positiva, con varios miembros de la comunidad mostrando interés en asistir a la familia de Kira. "No estamos solos", comenta Zulma, "cada pequeño aporte suma para alcanzar nuestro objetivo. Estas muestras de solidaridad nos llenan de esperanza en un momento tan difícil".
Cómo ayudar a Kira
Para cualquier persona que desee contribuir a la recuperación de Kira, la familia ha facilitado un número de contacto: 316 7842490, donde los interesados pueden obtener más detalles sobre cómo realizar donaciones o aportar con otros tipos de ayudas.
La historia de Kira es un recordatorio conmovedor de la vulnerabilidad de nuestros compañeros animales y de la importancia de la comunidad en el cuidado de nuestros seres queridos. Al unir esfuerzos, se espera que Kira pueda pronto someterse a la cirugía que le permitirá volver a correr y jugar con los niños de su hogar, a quienes tanto extraña.
La responsabilidad sobre nuestras mascotas es un compromiso de por vida. Incidentes como el de Kira nos llaman a reflexionar sobre la seguridad y el bienestar de los animales que nos acompañan. Asimismo, es un llamado a las autoridades y a la comunidad en general para que se implementen medidas más efectivas que prevengan el robo y el maltrato a mascotas.
La historia de Kira es la historia de muchas otras mascotas que cada día enfrentan situaciones similares de abuso y negligencia. Por eso, es crucial abogar por políticas de protección animal más estrictas y fomentar una cultura de respeto y amor hacia todos los seres vivos.
Hasta que Kira pueda volver a casa completamente recuperada, es esencial continuar apoyando a su familia y difundir este caso no solo para que reciba la cirugía que necesita, sino también para crear conciencia sobre las necesidades y derechos de los animales en todo el mundo. Kira merece una segunda oportunidad, como cualquier ser amado que ha enfrentado la adversidad. 🌟